miércoles, 28 de octubre de 2009

¿Hacia dónde miran "Los ojos de Ariana"?



Prohibido volar cometas, prohibido llevar ropa extranjera, prohibida la música… Lo que en un principio parecen órdenes vetustas, no son sino los preceptos en los cuales la ideología talibán se ha centrado para gobernar a todo un país, Afganistán.

Los ojos de Ariana es un documental que no deja impertérrito a nadie. Dirigido por Ricardo Macián (corresponsal de TVV en Afganistán) y basado en hechos reales, narra la historia específica de la situación de las obras fílmicas afganas durante el gobierno talibán. Los operarios de Afgan Films (la Filmoteca Nacional de Kabul) tuvieron el valor de proteger y rescatar uno de los tesoros de la cultura del país, aún poniendo en peligro sus propias vidas.

Con la ayuda de un cuentacuentos y una joven actriz afgana (raro, pero cierto), se teje una historia que, en lugar de verdadera, se nos asemeja ficticia. Dobletechos, suciedad, miedo e incertidumbre, provocados por la presión talibán, conforman el hilo argumental del film. Las cosas ahora han cambiado; al menos, las películas ya no se consideran un foco de mal que pueda destruir la ideología de los afganos (tal y como pensaba este grupo guerrillero). Pero lo que no consiguieron arrebatarles a los trabajadores de Afgan Films, ahora lo está logrando el paso del tiempo.

Así lo lamenta el director de la Filmoteca Nacional de Kabul, Abdul Latif, al reinvidicar una mayor atención a la cultura fílmica del país. “Más de 36 países están en Afganistán, pero se centran más en buscar terroristas que en intentar conservar el patrimonio cultural de nuestro territorio”, reflexiona.

El documental, sin embargo, cada vez abre más los ojos de la gente respecto a esta realidad. Nominado a los Goya, Los ojos de Ariana ha recibido el premio a la mejor fotografía, mejor dirección y mejor ópera prima en el Festival Internacional de cine documental de Cuba.

1 comentario:

  1. Me va encantar el documental! El principi (a causa de la matinejada...) es va fer un poquet pesat, però quan anaves veient el risc que varen viure per poder salvar la seua cultura...mereixia totalment la pena estar allí!
    Un beset xiques, continueu informant-nos!

    ResponderEliminar